Colección “José Díaz Ruíz”

PRESENTACIÓN

Por Alfonso Garibay García

Entre los años de 1966 y 1972, José Díaz Ruíz (nacido en 1941 en Sevilla, España) conformó una colección musical de origen ixil y k’iche’ mientras fue misionero en las parroquias de la municipalidad de Zacualpa y Nebaj del departamento El Quiché en Guatemala, en la región noroccidental del país. La atracción manifiesta por las expresiones musicales que fue conociendo durante su estancia como párroco se sumaron a su convicción personal de, “prestar mi colaboración al desarrollo del Quiché”, la generación por el trabajo de compilarlas poco a poco en apuntes, escritos y transcripciones en pauta o “solfa” (primeramente), y en grabadora (posteriormente), con la anexión de otros materiales adquiridos: como fotografías, diapositivas, instrumentos musicales, vestimentas y bibliografía, formulando un proyecto que reconociera y respetara la riqueza cultural de las comunidades indígenas.

Aunada a su formación sacerdotal constituida en 1965 en la Congregación de Misioneros del Sagrado Corazón (MSC) en Logroño, España - establecida con anterioridad en la capital de la provincia La Rioja, al norte de la península ibérica en 1929 -, complementó estudios musicales con los profesores del Seminario Metropolitano Juan Ramón Gallardo Soriano (n. 1935)  y Manuel Castillo Navarro-Aguilera (1930-2005): piano, órgano, solfeo, canto gregoriano y demás asignaturas musicales, “practicando la composición y ejerciendo como organista y director de coro”. Ello conformó su sensibilidad hacia el surgimiento e interés por una recopilación musical y de tradiciones originarias de aproximadamente treinta y cuatro sitios, catalogados en su archivo en dos regiones principales: quince procedentes de la zona k’iche’ y diecinueve de la zona ixil, a razón de comprender y “conocer lo más a fondo posible […] las manifestaciones reales y vitales con que [las comunidades] expresaban su modo de ser, de pensar, de sentir y de comportarse”.

Este acervo hoy se integra al proyecto “Universos Sonoros Mayas” de la Universidad Nacional Autónoma de México a través de la gestión de su Centro de Estudios Mayas del Instituto de Investigaciones Filológicas, el cual difundirá en este sitio web previamente organizado por su compilador, el cual está conformado por ciento sesenta y tres obra, clasificadas en dos rubros generales: piezas vocales e instrumentales.

El archivo está constituido en su totalidad por 124 registros sonoros, 32 registros pautados, y, conforme a la estipulación de Díaz Ruíz, 7 más que deben ser considerados como referenciales, “[obras] añadidas a la colección por su temática o por basarse o glosar alguna de las recopiladas” como lo es su Misa Maya-Quiché compuesta en 1967 y estrenada en España en el 2004.

La divulgación del acervo musical fue considerado desde un período temprano en que éste prácticamente se conformó, pero dado a que las actividades clericales de Díaz Ruíz no eran compatibles con una empresa cultural como la que se proponía, abandona Guatemala y regresa a España en 1972 y procede  a la catalogación del mismo, presentando un primer panorama de éste en 1976.

La conservación de este conjunto que ha efectuado Díaz Ruíz desde entonces - con la penuria en ocasiones por preservarlo de su deterioro - es invaluable, porque es muy posible que hoy día las personas que fueron enriqueciéndolo hayan padecido por causas naturales o violentas, ya que en aquel entonces eran personas de avanzada edad, dato que se suma al corte generacional de la transmisión de su continuidad o incluso por su inmigración a otras zonas en búsqueda de crecimiento social. Como ha subrayado nuestro compilador: “lo recogido puede ser en las fechas actuales incluso hasta desconocido en su totalidad, o en parte, por la mayoría de los habitantes de la zona”.

La colección indica el título, el género, el lugar, la fecha, el nombre de los informantes e intérpretes,  o si son anónimos. Finalmente como suele enfatizar José Díaz Ruíz en nuestros días: “[el archivo] puede que pase a considerarse como algo salvado de la extinción”.